viernes, 24 de enero de 2014

LUEGO SERÁ DISTINTO-Photowriting Paula Arbide

                                                                            ©Paula Arbide
…y no sabes cómo siento que mamá y tú os avergoncéis de mí, abuela, pero debéis comprender que aquí las cosas son muy difíciles. Cuando tuve que marcharme del colegio anterior, ya le dije a mamá que no iba a permitir que nada me impidiera entrar en la universidad, y nada es nada. Yo no quiero ser diferente ni soy la bandera de nadie. Lo que hago es igual a lo que hicimos al venir del campo, de una casa antigua de cientos de metros y con toda la vista por delante a este piso de cincuenta y dos metros cuadrados y con hormigón por horizonte.  Lo mismo. Nuestra vida no se parece en nada a la de entonces y nosotros tampoco. Toda la familia ha invertido sus ahorros para que yo alcance mi objetivo, tengo una responsabilidad, y no voy a rendirme por no saber adaptarme al lugar en el que vivo. Somos gente práctica, las cosas son así como el sol es en verano. Si un grupo de miserables puede destrozar mi futuro con sus insultos, yo usaré contra ellos la inteligencia. No soy tan oscura ni llevo la raza tan marcada. Me he cortado la trenza y llevo una melena corta, de color tostado, neutro, parecido al de mis compañeras. He aprendido a perfilarme los labios y los ojos hasta redondearlos un poco, diría que bastante. Y sí, es verdad, llevo una base de maquillaje aclarador que me quita cinco tonos. ¡Y una faja que me rebaja el culo, abuela! Parezco normal, no llamo la atención. Si voy disfrazada nadie se meterá conmigo y podré céntrame en los estudios. Será sólo un año, luego en la universidad es distinto…
 
 


sábado, 18 de enero de 2014

PASTOR A LA INTEMPERIE en el Diario Montañés

 
 
Somos muchos los que hemos apostado por Alberto Muñoz, compañero de editorial, buen poeta y mejor persona. Que Guillermo Balbona le dedique una página de Sotileza, remachada con precisión por Vicente Gutiérrez Escudero, es un acontecimiento. Bravo por Alberto. Estoy seguro de que esto le animará a llevar adelante su siguiente libro de poemas. Ya estamos esperando.
 
Y éstas son las palabras de Vicente Gutiérrez Escudero en su página de Facebook:
 
Hoy El Diario Montañés dedica una página entera al nuevo poemario de Alberto Muñoz titulado "Pastor a la intemperie", un libro que no tiene desperdicio alguno. Fue presentado por Emilio Carrera y Francisco Taboada Balado el pasado 20 de diciembre. En esa misma página, abajo, aparece un breve artículo mío. He aquí dicho artículo.
 
 PURA INTEMPERIE 
 “Pastor a la intemperie” es uno de esos poemarios que me gusta releer una y otra vez. Es un soplo de frescura, un oasis inesperado, un laboratorio verbal insólito en el panorama poético actual. Funciona además a modo de antídoto contra el imperio de lo convencional, así como contra la -tan difundida y premiada aún por el poder literario- poesía coloquial-realista y sus múltiples mutaciones. Yo sé lo que me aproxima a la poesía de Alberto Muñoz: es ante todo un acto de intervención radical en el lenguaje que cuestiona permanentemente sus funciones de representación y comunicación. En “Pastor a la intemperie” las palabras son sometidas a un operativo poético implacable: rupturas, permutaciones y asociaciones inesperadas; nada más abrir el libro descubrimos, a la izquierda, un poema ensamblado con recortes de periódico. A la derecha, el mismo poema aparece mecanografiado con ligeras modificaciones; versos que han cambiado de lugar, palabras que han sido sustituidas por otras y nuevos signos de puntuación. Presenciamos no sólo el resultado sino parte del proceso. Es una experiencia de lectura fascinante pues como bien afirmó Francisco Taboada el pasado 20 de diciembre en su soberbia presentación del libro: “al poder escoger entre varios momentos del mismo poema, en un tiempo flexible, multiplicamos las posibilidades de acceder al significado”. Son un total de 52 poemas llenos de humor, onirismo, extrañeza y reflexión. La verdad que sorprende que hayan sido creados mediante la unión azarosa de frases dispersas. Sin embargo, el producto final no juega a ser enigmático sino que lanza un mensaje concreto, claro y luminoso, aunque lleno de vértices y resquicios en los que brota siempre la magia del lenguaje y la persuasión. Al lector, en cada relectura, no le quedará más remedio que ejercer su libertad; cada poema parecerá reescribírsele ante sus ojos, en una grata prestidigitación de la sintaxis. He aquí el juego libre, la ruptura de los códigos de autoridad lingüística, el habla arrojada a las intemperies despiadadas del irracionalismo y el inconsciente. El azar frente a lo sistemático. El arrebato lírico frente al lenguaje considerado como residuo o mera servidumbre.
 
 Vicente Gutiérrez Escudero
 
 
 

domingo, 5 de enero de 2014

DOS MIL CATORCE, poema


Dos mil catorce

 


No te rindas a la evidencia

no lo dejes

no claudiques

no permitas que te cuantifiquen,

regístrate tú

antes de ser registrado,

indágate

antes de que te espíen,

lleva tú

la dirección de tu caos,

eso al menos te pertenece.