sábado, 18 de abril de 2020

REFLEJO, poema


REFLEJO

Avanza el reflejo por la alfombra sucia
recorriendo la dejadez de los días dormidos
las horas mustias que veo pasar, solitarias,
mientras se posan el polvo y la mugre
sobre el viejo tejido deshilachado y roto.

La puerta del armario con el espejo gris
se mueve con la ligera brisa de la mañana
la luz no se está quieta, se abalanza, corre,
en pocos minutos lo inexorable ha trazado
el rumbo del camino, la jornada que se aleja.

Pasaré aquí cada segundo, escuchando el latido
como ser que convalece de la fiebre del tiempo
aquietando o alargando la resistencia cruel
observando el reflejo que mengua y desaparece
al ritmo del sol que no me espera y pasa.

Nada le puedo aportar a este día cualquiera
apenas los ojos, el débil pestañeo cansado
un cambio de postura, un gesto acaso,
mantener despierta esta cordura tenaz
para evitar que un desvarío me destrone.

Y alzarme aquí, sobre el hambre que no cesa,
la pérdida permanente de un sentido
la carne que suda su inquietud
el ruido interno de los oídos sordos
este cuerpo, que ansía y teme, la noche cierta.

Ilustración: SeD

0 comentarios:

Publicar un comentario